1 de mayo de 2013

Pep Guardiola en Bogotá

Mi primer pensamiento cuando me percaté de la ampulosa publicidad que anunciaba una conferencia de Pep Guardiola en Bogotá fue de absoluta incredulidad. ¿Qué persona pensante querría pagar cientos de miles de pesos para ver a un director técnico (que en todo caso no deja de ser un ex-futbolista) hablando de sobre liderazgo y trabajo en equipo? Afortunadamente Pep me dejó callado a mi y a todos los que pensábamos que solamente veríamos una charla de alguien similar a Leonel Álvarez (quien, a propósito, acudió a ver a Guardiola pero quien seguramente no captó mucho del mensaje).


Por azares de la vida recibí de cortesía una boleta para asistir a la conferencia del otrora técnico del Fútbol Club Barcelona ayer martes 30 de abril de 2013 a las 7:00 PM. El escenario en el cual se presentó Guardiola no estaba dentro de mi radar. Se trataba del centro de convenciones G12 situado en la carrera 30 con avenida de las Américas, con capacidad para alrededor de 8000 personas. Según entiendo, el lugar es utilizado ordinariamente por una secta cristiana por lo que, fuera de la impresión que me causa saber que existe un recinto con esas características en la zona industrial de la capital, sentí profunda angustia de saber que el G12 reúne periódicamente a casi 10.000 fieles devotos dispuestos a tributar a su pastor.

En el auditorio, que estaba pomposamente decorado con publicidad del Grupo Aval, resonaba una música electrónica que más parecía de un desfile de modas de Medellín. A las 7:15 de la noche apareció la presentadora del evento, Andrea Guerrero (quien por su falta de preparación y nerviosismo se constituyó como uno de los lunares de la noche), para presentar a Manel Estiarte, considerado por muchos como el mejor waterpolista español de todos los tiempos y quien adicionalmente fue parte de la directiva del Fútbol Club Barcelona entre 2008 y 2012. Manel hizo una breve charla introductoria al tópico principal de la jornada: liderazgo y trabajo en equipo. Contó cómo desempeñó su papel de líder de la selección de waterpolo en los olímpicos de Barcelona 1992 y Atlanta 1996 y cómo el reconocimiento público puede ser una trampa enorme para la integridad humana de una persona. Si bien sus palabras fueron elocuentes, nadie quería verlo a él. El público esperaba a Guardiola.

Concluida la primera de las intervenciones, apareció el entrenador cual estrella de pop rodeado de humo y luces estroboscópicas. Su presencia fue abrumadora para mas de una de las señoras, quienes suspiraron morbosamente con la imagen atlética y guapa del cataln), pero más allá de eso, Pep demostró que en efecto tiene una mente especial y diferente, idónea para dirigir un equipo.

Inició su amable presentación señalando que esta era su primera charla a un público grande y que, si bien constantemente ha hablado frente a muchas personas, siempre había tenido todo preparado y a la mano. "Aún no entiendo para qué me han traído" dijo, "trataré de contar mis experiencias, pero tengan claro que no podré decirles el secreto para ser un líder... He de confesar que he decidido venir a dar esta conferencia para salirme de la difícil tarea que he desempeñado en el último año: dejar y recoger a mis hijos en el colegio..." El público lo seguía atento con sonrisas marcadas en las caras.

Pep recordó la primera vez que se enfrentó a una selección como técnico y de lo difícil que fue encontrar el discurso perfecto para antes de salir a jugar. Después de mucho elucubrar, Guardiola pensó que toda disertación táctica ya había sido expuesta y que en ese escenario, lo correcto sería hablar de su inicio en el "difícil, indescifrable y abierto" deporte que lo apasionaba de niño. "Todo jugador de fútbol empieza porque alguna vez, de chico, pateó un balón, y desde entonces esa pelota se convierte en el motivo. Nadie se hace jugador de futbol por el dinero o la fama, nos hacemos jugadores porque amamos el balón más allá de compromisos profesionales y ambiciones..." De esta manera avanzaba una charla elocuente de un ser humano analítico y lúcido.

El catalán transmitió cada una de sus experiencias coligadas al liderazgo de forma sencilla, haciendo ver fácil lo que en realidad no lo es tanto. Contó que a lo largo de su trayectoria ha aprendido que "todo lo que hacemos lo hacemos para que nos quieran" y que eso es lo que nos mueve a ser los mejores. Señaló que en el fútbol, y en la vida, todas las personas son diferentes y se deben tratar según sus calidades íntimas (en este punto ejemplificó con sus jugadores: están los que necesitan reconocimiento publico y los que mejor prefieren atención privada; el que reacciona bien si lo lleva a tomar un café para hacerlo aterrizar y el que es competitivo y requiere de charlas técnicas) "cada persona tiene un botón único que se debe apretar de la manera adecuada y en el tiempo correcto, a cada persona se le debe hablar en el idioma que mejor entiende."

Fue una presentación fenomenal. Llena de datos interesantes, anécdotas de vida y experiencias profesionales cuyo trasfondo cumplía con el objetivo del foro cual era el de reconocer el liderazgo y aprender del trabajo en equipo.


Con posterioridad a las breves palabras de Pep, tuvo lugar un conversatorio con Roberto Pombo director del periódico El Tiempo. Esta etapa del evento, que ha podido ser el momento para clarificar dudas y aterrizar enseñanzas, fue un fiasco. Pombo no supo realmente lo que estaba haciendo ni a quién se estaba enfrentando. Hizo una entrevista babosa que evidenció una subestimación imperdonable tanto al entrevistado como al auditorio y tarde vino a percatarse que tanto auditorio como entrevistado fueron superiores a él. En relación con el tema del evento no hubo un solo interrogante pues el periodista optó por hacer preguntas gelatinosas sobre fútbol.

¿Qué opina sobre su nuevo equipo el Bayern Munich? Guardiola respondió que sería irrespetuoso de su parte ir dando declaraciones sobre su nuevo club por fuera de Alemania y que hablará de él cuando esté frente a ellos. El auditorio estalló en aplausos y Pombo no pudo más que dejar ver su angustia en su cara regordeta. ¿Cómo es Messi? "El chaval la mete..." (Risas) "Un jugador se conoce en la cancha, y ustedes lo han visto, no hay mucho más que eso". ¿Mañana en el partido de la Champions League, va por el Bayern o por el Barcelona? "Yo le hago fuerza al buen fútbol".

Prosiguió el conversatorio y el entrevistador, quien al parecer no puso atención en la primera fase de la exposición, interrogó acerca de temas a los que Guardiola ya se había referido. ¿Cómo se inicia usted en el fútbol? "A ver que ya os lo he dicho, pateando un balón en la plaza de mi pueblo". ¿Tiene usted la particularidad de saber tratar a cada cual según su forma de ser? "Eso ya lo he tratado de decir, cada jugador tiene su fibra y trato de tocarla en cada uno".

Cuando el fracaso fue inminente, Roberto Pombo apeló a un recurso desleal y bajo: "hace unas horas hablé con el ex-presidente del gobierno español Felipe González, quien a propósito, le manda saludes. Él me dijo que usted es un excelente estratega, es eso cierto? A Guardiola no le pudo importar menos la evocación de un ex-presidente de su país y atinó a decir "a raíz del reconocimiento publico la gente sobrevalora lo que uno hace."

Pregunta tras pregunta Pep demostraba su altura intelectual frente a un entrevistador que no supo respetarlo. La falta de química fue evidente y la incomodidad del entrenador fue notoria. Sin embargo, cautivó a su público con cada respuesta cortante. Por fortuna para todos la mala entrevista no duró mucho. La pena ajena ya no podía más. 

El evento finalizó con la llegada de un grupo de niños de escasos recursos quienes se identifican con el Bayern Munich. Uno de los pequeños, que iba a hablar de lo importante que era conocer a Pep, quedó mudo de los nervios. Guardiola, apelando a su capacidad de hablar el lenguaje de su interlocutor, le lanzó un balón de futbol e hicieron dos o tres pases.

5 comentarios:

  1. Buen resumen. Opino lo mismo. Creo que eres muy generoso con Pombo. Javier

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  2. Yo estuve presente en la conferencia y me salí cuando empezó pombo con tanta babosada, qué vergüenza con guardiola; pero más vergonzoso que este señor pombo sea director del periodico más importante del país.

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  3. Hola Jaime. Soy Jorge Hevia , productor del programa de radio español de la Cadena COPE Tiempo de Juego .Me gustaría poder contactar contigo por teléfono o vía mail . Si puedes dejarme una forma de contacto en jhevia@cope.es o jheviam@gmail.com , te lo agradecería. Saludos!

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  4. Desgraciado,
    Te lo dije, sigue escribiendo que te buscaran!

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  5. Me encanta como escribes! Quiero conocerte!

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